TEXTOS BÍBLICOS EXPLICADOS
Juan 14:27 | “La paz les dejo”
“La paz les dejo; mi paz les doy. No se la doy como el mundo la da. Que no se les angustie ni acobarde el corazón” (Juan 14:27, Traducción del Nuevo Mundo).
“Les dejo la paz, mi paz se la doy. Una paz que no es la que el mundo da. No vivan angustiados ni tengan miedo” (Juan 14:27, La Biblia Hispanoamericana).
Significado de Juan 14:27
Con estas palabras, Jesús les confirmó a sus apóstoles que no debían preocuparse demasiado cuando tuvieran problemas, sino que, como él, podrían tener paz interior con la ayuda de Dios.
¿Cómo era la paz que Jesús les dejaba, o les daba, a sus apóstoles? Jesús les daba su paz, es decir, la misma que él sentía. Pero tener esa paz no significaba que estarían libres de problemas o sufrimientos (Juan 15:20; 16:33). Aunque a Jesús lo trataron injustamente y eso acabó en que lo ejecutaran, él sintió paz en su mente y corazón (Lucas 23:27, 28, 32-34; 1 Pedro 2:23). Se sentía tranquilo y calmado porque sabía que contaba con el amor y la aprobación de su Padre, Jehová a (Mateo 3:16, 17).
Jesús les dio paz a sus apóstoles al asegurarles que tanto él como su Padre los amaban y les daban su aprobación (Juan 4:23; 15:9, 10; Romanos 5:1). Esa paz se basaba en la fe que tenían en Jesús como Hijo de Dios, y eso los ayudó a dejar a un lado sus miedos y sus preocupaciones (Juan 14:1). Aunque Jesús ya no estaría físicamente con ellos, les prometió que el espíritu santo de Dios les daría la confianza y la paz interior que necesitaban (Juan 14:25-27). Así que los seguidores de Jesús podrían enfrentarse a situaciones difíciles con valor, porque sabían que contaban con la aprobación y el apoyo de Jehová (Hebreos 13:6).
En la época en la que Jesús estuvo en la Tierra, la gente tenía la costumbre de desearle paz a otra persona cuando se saludaban (Mateo 10:12, 13). Pero Jesús no solo les deseó paz a sus apóstoles, sino que les dio paz. Es más, la paz que Jesús les daba es diferente de la paz que podría dar el mundo. b El mundo solo puede ofrecer algo de paz a través de la relación con otras personas, la fama, las riquezas o la posición social. Pero la paz de Jesús no depende de las circunstancias de la vida, sino que es una paz interna y duradera.
Contexto de Juan 14:27
Jesús les dirigió estas palabras a sus apóstoles fieles la noche antes de morir. Les dijo que pronto los dejaría (Juan 13:33, 36). Eso los entristeció mucho (Juan 16:6). Por eso, Jesús los consoló y les dio razones para no estar preocupados.
Del mismo modo, esas palabras de Jesús nos animan a los cristianos hoy día, porque nosotros también podemos tener paz (2 Tesalonicenses 3:16). Cuando nos hacemos seguidores de Jesús, aprendemos que tanto él como su Padre, Jehová, nos dan su amor y su aprobación (Colosenses 3:15; 1 Juan 4:16). Y como resultado no nos preocupamos demasiado. ¿Por qué? Porque Jehová está a nuestro lado (Salmo 118:6; Filipenses 4:6, 7; 2 Pedro 1:2).
Para tener una visión general de lo que trata el libro de Juan, vea este breve video.
a Jehová es el nombre de Dios (Salmo 83:18). Vea el artículo “¿Quién es Jehová?”.
b En la Biblia, la palabra mundo se refiere al conjunto de personas malas que están alejadas de Dios.