AYUDA PARA LAS FAMILIAS | PADRES
Los beneficios de hacer cosas creativas
Cuando hablamos de “cosas creativas”, nos referimos a juegos y actividades que despiertan la imaginación y fomentan la curiosidad de los niños. Son cosas que mejoran su desarrollo y sus habilidades manuales.
Estos son algunos ejemplos:
Dibujar
Cocinar a
Jugar a personajes y situaciones imaginarias
Cantar
Construir cosas con piezas
Jugar con objetos sencillos (una simple caja de cartón puede convertirse en cualquier cosa)
En muchos países, los niños ya no juegan a estas cosas creativas. En vez de eso, se divierten con lo que se conoce como entretenimiento pasivo —viendo cosas que otros hacen— o con actividades programadas.
Como padre o madre, ¿debería preocuparle eso?
Lo que debe saber
Hacer cosas creativas contribuye al desarrollo de su hijo. Los juegos creativos pueden mejorar la salud física y mental de su hijo, despertar su imaginación y ayudarlo a llevarse bien con los demás. También pueden enseñarle a tener paciencia, a saber tomar buenas decisiones, a controlar sus emociones y a interactuar con otros niños cuando juegan en grupo. En pocas palabras, ser creativo prepara a su hijo para la vida adulta.
La sobredosis digital puede hacerle daño a su hijo. Demasiado tiempo frente a la pantalla puede crear adicción. Además, parece que el exceso de tecnología está relacionado con la obesidad infantil y el comportamiento agresivo en los niños. Ojo, esto es una advertencia para los padres que usan los aparatos electrónicos como niñera para sus hijos en edad preescolar.
Las actividades programadas tienen sus desventajas. Cuando arrastramos a nuestros hijos de una actividad programada a otra, les robamos el tiempo y la libertad de hacer cosas que potencien su curiosidad y su creatividad, cosas que son importantísimas para los niños.
Lo que puede hacer
Asegúrese de que tenga suficientes oportunidades para ser creativo. Si es posible, deje que su hijo pase tiempo al aire libre para que disfrute de la naturaleza. Dele la libertad de tener sus propios hobbies o pasatiempos y de jugar con juguetes que desarrollen su creatividad. b
Piense en esto: ¿Qué cualidades y habilidades puede cultivar mi hijo si juega a cosas creativas? ¿Cómo le ayudará eso en la vida?
Texto bíblico clave: “El ejercicio físico tiene algún beneficio” (1 Timoteo 4:8).
Controle el tiempo que pasa frente a la pantalla. Piénselo dos veces antes de usar el teléfono, la tablet o la tele como niñera de su hijo. Los pediatras recomiendan que los niños menores de dos años no usen dispositivos electrónicos ni vean la tele. Y recomiendan que los niños entre dos y cinco años no lo hagan más de una hora al día. c
Piense en esto: ¿Cuánto tiempo dejaré que mi hijo esté frente a la pantalla? ¿Debería quedarme con él? ¿Qué alternativas hay a los aparatos electrónicos?
Texto bíblico clave: “Tengan muchísimo cuidado de no comportarse como tontos, sino como sabios, aprovechando el tiempo de la mejor manera” (Efesios 5:15, 16).
Tenga en cuenta los efectos secundarios de las actividades programadas. Es verdad que esas actividades pueden hacer que su hijo desarrolle alguna habilidad o domine algún deporte. Pero muchas veces tener el día demasiado planificado estresa a los hijos. Y no solo a los hijos, sino también a los padres, que son los que normalmente los llevan de acá para allá. Obviamente, el consejo de Efesios 5:15, 16 sobre cómo usar el tiempo también aplica aquí.
Piense en esto: ¿Está mi hijo sobrecargado con demasiadas actividades? Si es así, ¿qué cambios se pueden hacer?
Texto bíblico clave: Asegúrese “de qué cosas son las más importantes” (Filipenses 1:10).
a Como para cocinar se usan utensilios peligrosos y temperaturas altas que pueden provocar accidentes, es mejor que los niños estén supervisados por sus padres o un adulto responsable.
b Muchos juguetes comerciales ya lo hacen todo y dejan poco margen para la creatividad. En cambio, los juguetes y los objetos sencillos, como las cajas de cartón y las piezas para construir cosas, hacen que los niños le den rienda suelta a su imaginación.
c Cuando hablamos de pasar tiempo frente a la pantalla, nos referimos a usar los aparatos electrónicos para entretenerse, no para hacer videollamadas a seres queridos o para ver programas educativos o espirituales en familia.