La religión verdadera
Enseñanzas de Jesús
La religión verdadera
¿Acepta Dios todas las religiones?
▪ A Jesús le partía el corazón ver cómo los líderes religiosos engañaban a la gente. Por eso previno a sus seguidores contra “los falsos profetas que vienen [...] en ropa de oveja, pero por dentro son lobos voraces” (Mateo 7:15). Nadie puede negar que en nombre de la religión se han cometido muchos abusos.
En una oración a Dios, Jesús afirmó: “Tu palabra es la verdad” (Juan 17:17). Está claro, entonces, que Dios no acepta ninguna religión que contradiga lo que enseña la Biblia. De ahí que Jesús aplicara a los líderes religiosos hipócritas las siguientes palabras de Dios: “En vano siguen adorándome, porque enseñan mandatos de hombres como doctrinas” (Mateo 15:9).
¿Hay una religión verdadera?
▪ Durante una conversación con una mujer de Samaria, Jesús le dijo: “Ustedes adoran lo que no conocen”. Viendo que los samaritanos vivían engañados por su religión, Jesús le explicó: “Los verdaderos adoradores adorarán al Padre con espíritu y con verdad, porque, en realidad, el Padre busca a los de esa clase para que lo adoren” (Juan 4:22, 23). Por tanto, si hay adoradores verdaderos es porque hay una religión verdadera.
Y esa religión era la que enseñaba Jesús. Él mismo dijo: “No hago nada por mi propia iniciativa; sino que hablo estas cosas así como el Padre me ha enseñado” (Juan 8:28). De ahí que dijera: “Yo soy el camino y la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí” (Juan 14:6). Así que si solo hay un camino para acercarse al Padre, solo puede haber una religión verdadera.
¿Cómo reconocer la religión verdadera?
▪ Los verdaderos cristianos imitan a Jesús en al menos cuatro aspectos.
1. “He dado a conocer tu nombre”, le dijo Jesucristo a Jehová (Juan 17:26). Los verdaderos cristianos también usan el nombre de Dios.
2. Jesús habló del Reino de Dios y mandó a sus seguidores que predicaran ese mismo mensaje de casa en casa. “En cualquier ciudad o aldea que entren —les dijo—, busquen hasta descubrir quién en ella es merecedor.” Y tiempo después añadió: “Vayan, por lo tanto, y hagan discípulos de gente de todas las naciones” (Mateo 10:7, 11; 28:19). Hoy día se reconoce a los cristianos verdaderos porque siguen realizando esa obra.
3. Jesús nunca se metió en política. Y lo mismo hacían sus discípulos, pues declaró: “Ellos no son parte del mundo, así como yo no soy parte del mundo” (Juan 17:14). Así pues, los cristianos verdaderos deben ser neutrales en política.
4. Jesús estuvo dispuesto a hacer sacrificios por su gran amor a los demás. Y a sus seguidores les recordó: “Todos conocerán que ustedes son mis discípulos [...] si tienen amor entre sí” (Juan 13:35). En otras palabras, los cristianos verdaderos se aman unos a otros y no participan en guerras.
¿Cómo beneficia a las personas la religión verdadera?
▪ Para practicar la religión verdadera, antes hay que conocer bien a Dios. Este conocimiento les permitirá a las personas mejorar sus vidas y hará que crezca su amor por Jehová. Y la recompensa que él promete a quienes lo aman es vida sin fin. Con razón, Jesús dijo: “Esto significa vida eterna, el que estén adquiriendo conocimiento de ti, el único Dios verdadero” (Juan 17:3).
Si desea más información, consulte el capítulo 15 de este libro, ¿Qué enseña realmente la Biblia? editado por los testigos de Jehová.
[Ilustración de la página 16]
“Guárdense de los falsos profetas que vienen a ustedes en ropa de oveja, pero por dentro son lobos voraces.” (Mateo 7:15)