Busque la ayuda de Dios
“Cuando mi esposo nos abandonó, le rogué a Dios que nos diera fuerzas, y él escuchó mi oración. Nunca nos ha faltado lo básico. Siempre nos ha dado su ayuda y su guía.” (MAKI, DE JAPÓN)
EN EL mundo cada vez más materialista de hoy, la gente apenas piensa en el Creador. En cambio, él se preocupa por nosotros y quiere que seamos felices. Su sentir se expresa a la perfección en Isaías 41:10: “No tengas miedo, porque estoy contigo. [...] Yo cierta y verdaderamente te ayudaré”.
En el artículo anterior vimos la manera en que Dios nos brinda apoyo mediante su Palabra y los valores sanos que contiene (2 Timoteo 3:16). Pero la Biblia es mucho más que una guía. También nos revela la extraordinaria personalidad de Dios y el amor que nos tiene. Como han descubierto infinidad de padres cristianos —con y sin cónyuge—, poner en práctica los principios bíblicos al criar a los hijos nos permite experimentar la bondad de Dios.
Robert, de Austria: “Jehová Dios es mejor padre que cualquiera de nosotros. Él sabe lo que necesitan nuestros hijos y cómo protegerlos. Por eso oro tan a menudo con mi hija”.
Ayusa, de Japón: “Cuando escucho a mi hijo decir que Jehová está con nosotros y que todo va a salir bien, me doy cuenta de que confía en él, y eso me hace muy feliz”.
Cristina, de Italia: “Si un problema parece demasiado grande para mí, le oro a Jehová y lo dejo en sus manos. Enseguida me embarga la paz, pues sé que la situación se resolverá de la mejor manera”.
Laurentine, de Francia: “Con toda certeza puedo decir que Jehová ha bendecido mis esfuerzos por criar sola a mis hijos. Él realmente viene en auxilio de los afligidos y de los huérfanos de padre o madre”.
Keiko, de Japón: “Dios es imparcial. Él desea mostrar su tierno cariño a todas las familias, tengan los dos padres o solo uno” (Hechos 10:34).
Reflejando la compasión de Dios y su interés por nosotros, Jesucristo dijo: “Vengan a mí, todos los que se afanan y están cargados, y yo los refrescaré [...], porque soy de genio apacible y humilde de corazón, y hallarán refrigerio para sus almas” (Mateo 11:28-30). No lo dude, Jesús y su Padre, Jehová, quieren que nos sintamos seguros; ellos nos cuidan y protegen. En Salmo 34:8 leemos: “Gusten y vean que Jehová es bueno”. Dios lo invita a comprobar por usted mismo que sus consejos sí funcionan y que él se preocupa por su bienestar. ¿Aceptará su afectuosa invitación?