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¿Qué causa la obesidad?

¿Qué causa la obesidad?

¿Qué causa la obesidad?

“Nos hallamos en medio de una epidemia que repercutirá enormemente en la salud de nuestros hijos y que no se detendrá a menos que la sociedad tome de inmediato medidas preventivas.”—William J. Klish, profesor de Pediatría.

QUIENES no tienen problemas de peso tienden a erigirse en jueces y dictaminar que los que padecen sobrepeso u obesidad son personas sin motivación ni fuerza de voluntad. Pero ¿es esta una cuestión tan simple? ¿Son los obesos individuos indolentes que rehúyen el ejercicio? ¿O entran en juego otras causas mucho más difíciles de controlar?

Genética y entorno

El libro Food Fight señala: “Hace tiempo que se debate si la obesidad tiene su origen en la genética o en el entorno”. ¿Qué se quiere decir con “genética” en este contexto? Hay quienes defienden la teoría de que el cuerpo humano tiende a almacenar las calorías excedentes para necesidades futuras. La citada obra continúa: “La relación de la genética con la obesidad se lleva estudiando por décadas. [...] Se han recabado muchos datos al respecto. Mediante técnicas sofisticadas se está tratando de identificar los genes que nos predisponen a engordar y a padecer enfermedades como la diabetes. En términos científicos, del 25 al 40% de la variación del peso de la población puede achacarse a los genes [...]. Dado que suele culparse al obeso de su estado, estas cifras ponen de relieve la importancia del factor biológico. Con todo, un 60% o más de dicha variación puede atribuirse al ambiente”. Según lo anterior, el estilo de vida sigue siendo un factor decisivo. ¿Consume la persona a diario más calorías de las que quema? ¿Suele ser deficiente su selección de alimentos? ¿Hace ejercicio moderado todos los días?

La Clínica Mayo explica la causa de la obesidad de forma sencilla: “Los genes quizá preparen el camino para el sobrepeso y la obesidad, pero el peso corporal lo determinan en última instancia la dieta y el ejercicio. A la larga, el exceso de calorías y el sedentarismo, o ambos factores, producen obesidad” (cursivas nuestras). Además, esta misma fuente añade: “La herencia biológica no nos predestina a la gordura. [...] Sea cual sea la estructura genética, el peso es el resultado de la alimentación y la actividad física”.

A fin de recuperar su figura, mucha gente desesperada prueba diferentes métodos para adelgazar en torno a los cuales se erige un negocio millonario. Ahora bien, ¿qué opinan de tales programas los especialistas? “La obesidad es muy difícil de tratar, y la mayoría de las personas que pierden peso vuelven a engordar —dice la obra Food Fight—. Los cálculos más optimistas revelan que solo el 25% de las personas [1 de cada 4] logra mantener su peso después de adelgazar, y a menudo tras varios intentos.”

Los peligros de la obesidad

La obesidad puede desencadenar graves problemas de salud. Scott Loren-Selco, neurólogo del Centro Médico de la Universidad de Southern California, advierte que las personas obesas, aunque sean jóvenes, pueden enfermar de diabetes de tipo 2 (véase ¡Despertad! del 8 de mayo de 2003). “Cada vez tenemos más casos y, créanme, da miedo —señala—. [A los pacientes obesos] les digo que si fueran a la sección de diabéticos, verían lo que les puede llegar a ocurrir: ceguera, amputaciones, multitud de enfermos graves [de diabetes] de tipo 2... y todo debido a la obesidad.” ¿Qué contribuye al problema? “Como tienen dinero para hamburguesas y papas fritas gigantes, las compran —afirma el facultativo—. Nadie los previene de ese gran error, ni la industria de la comida rápida ni, francamente, la mayoría de los médicos, quienes aún carecen de formación en materia de alimentación.”

El doctor Edward Taub, célebre escritor de obras sobre nutrición, afirma: “En los últimos tiempos se ha popularizado, y hasta se considera políticamente correcta, la opinión de que el sobrepeso es un aspecto normal y aceptable de la vida moderna. Lo cierto es que este mensaje constituye un asombroso éxito publicitario de una industria que se enriquece a base de engordarnos”.

Según los especialistas, la “figura de pera”, caracterizada por la acumulación de la grasa de más en las caderas, presenta menos riesgos para la salud que la “figura de manzana”, en la que el tejido adiposo rodea los órganos abdominales (en especial si la cintura supera los 90 ó 100 centímetros). ¿La razón? “La grasa abdominal incrementa el riesgo de sufrir hipertensión, enfermedades coronarias, diabetes, apoplejías y ciertos tipos de cáncer”, apunta el libro Mayo Clinic on Healthy Weight (La Clínica Mayo y el peso saludable). “La figura de pera —caderas, muslos y nalgas prominentes— conlleva menos riesgos.”

Entonces, ¿qué solución hay para los millones de adultos y niños del mundo entero que tienen sobrepeso y están en peligro de padecer graves problemas de salud? ¿Existe algún remedio eficaz?

[Recuadro y tabla de la página 5]

¿Qué es y para qué sirve el IMC?

El índice de masa corporal (IMC) mide la relación entre altura y peso, y sirve para determinar el sobrepeso y la obesidad. Según la Clínica Mayo, un IMC de 18,5 a 24,9 indica peso normal; de 25 a 29,9, sobrepeso, y a partir de 30, obesidad. ¿Qué revela de usted la tabla? ¿Tendrá que acudir al médico para hacerle alguna consulta o para que le confirme su situación?

A fin de calcular su IMC, divida su peso en kilos entre su altura en metros. Luego divida el resultado otra vez entre su altura. Un ejemplo: si pesa 90 kilos y mide 1,80 metros, su IMC es 28 (90÷1,8÷1,8=28).

[Tabla]

(Para ver el texto en su formato original, consulte la publicación)

Peso normal Sobrepeso Obesidad

IMC 18,5-24,9 25-29,9 30 o más

Altura (m) Peso (kg)

1,47 53 o menos 54-64 65 o más

1,50 56 o menos 57-67 68 o más

1,52 57 o menos 58-69 70 o más

1,55 59 o menos 60-71 72 o más

1,57 61 o menos 62-73 74 o más

1,60 63 o menos 64-76 77 o más

1,63 66 o menos 67-79 80 o más

1,65 67 o menos 68-81 82 o más

1,68 70 o menos 71-84 85 o más

1,70 72 o menos 73-86 87 o más

1,73 74 o menos 75-89 90 o más

1,75 76 o menos 77-91 92 o más

1,78 79 o menos 80-94 95 o más

1,80 80 o menos 81-97 98 o más

1,83 83 o menos 84-100 101 o más

1,85 85 o menos 86-102 103 o más

1,88 89 o menos 90-106 107 o más

1,90 90 o menos 91-108 109 o más

[Reconocimiento]

Información basada en el libro Mayo Clinic on Healthy Weight

[Recuadro de la página 5]

¿Qué es una caloría?

En nutrición se llama caloría a la unidad de medida de la energía térmica. Al transpirar, consumimos calorías, o energía térmica. “Una caloría es la cantidad de calor necesaria para elevar en 1 oC la temperatura de un kilo de agua.” (Balance Your Body, Balance Your Life [Equilibre su cuerpo, equilibre su vida].) El gasto calórico, o energético, de cada persona varía en función de factores como su altura, peso, edad y actividad física.

[Ilustración y recuadro de la página 6]

Indicativos de una vida sedentaria

▪ Pasar la mayor parte del día sentado (frente al televisor, el escritorio o conduciendo), es decir: inmóvil

▪ No caminar casi nunca más de 100 metros

▪ Tener un empleo en el que uno apenas se mueve

▪ No hacer de veinte a treinta minutos de ejercicio ni siquiera una vez por semana

[Reconocimiento]

Información basada en el libro Mayo Clinic on Healthy Weight